A sus 23 años, Luisito Pié tiene logros sumados que a muchos atletas le toma tiempo exhibirlo. Medallista olímpico en los Juegos de Río de Janeiro, 2016; plata en los Juegos Panamericanos de Toronto, 2015 y oro en los Juegos Centroamericanos y del Caribe, Veracruz, 2014.

¿Valioso, verdad? Pero eso no le da aval al peleador de taekwondo, considera, de ser un miembro del círculo de atletas de primer nivel, según su parecer. “Estamos entre la élite”, dice Pié, “pero en nuestra cabeza en sí no nos sentimos entre la élite porque sentimos que todavía hay que seguir trabajando”.

Un campeón nunca se sienta, es una ley no escrita entre atletas de alto nivel, en especial, porque el resto busca ese puesto. “Cuando uno se cree élite hay muchas cosas que uno descuida, entonces ahí cae esa gran pirámide”, dijo el atleta, premiado el pasado 2 de abril como el Atleta del año por la Asociación de Cronistas Deportivos.

“No me siento en la élite”, expresa. “Siento que todavía falta, hay pasos por dar”, señala. Y en tono de broma agrega: “cuando me esté retirando, diré si me siento en la élite”.

Pié competirá en junio próximo en el Campeonato mundial de taekwondo (22-30 de junio), en Muju, Corea del Sur para lo cual espera llegar en su mejor “forma deportiva”, ya que aun se recupera de una operación.

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