Las autoridades del municipio tienen que jugar su rol y sancionar a los inescrupulosos constructores y dueños de construcciones que ocupan calles y aceras con escombros y materiales de construcción como es el caso de la calle Isaías Contreras con Duarte, allí se han tomado la acera y la mitad de la calle para arrojar todo tipo de cosa sin importar la suerte de quienes caminan por allí viéndose obligados a tomar lo que queda de calle para pasar.

Otro caso lo es el del ingeniero que construye la sucursal del Banco de Reserva, estas personas se han tomado por más de seis meses dos tramos de calle para depositar desde tierra, agregados, madera y desperdicio, sin que nadie le diga nada.

Los espacios públicos, calles y aceras deben ser resguardados por la autoridad municipal y no permitir un uso diferente a estos, ya que por ello se producen accidentes, entaponamientos y daños a la propiedad privada, así como pérdidas de vidas humanas.