Los últimos hechos de sangre en nuestro municipio de Bayaguana nos llevan a realizar la reflexión de que en nuestros días la vida ya no vale nada, pues con una ligereza que asombra por cualquiera por cualquier quítamela paja decide contra la vida del otro sin mayores miramientos. Los problemas y diferencias siempre estarán presentes en nuestra sociedad pues no somos perfectos, cometemos errores, pero eso no debe llevarnos a olvidar que somos seres pensantes y que tenemos la capacidad de razonar. 

La violencia como repuesta a nuestros problemas solo trae más problemas nunca solución y no importa cual grande haya sido el error cometido por el otro tenemos que respetar la vida humana que es lo más grande de las pertenencia que pueda tener una persona, nadie es dueño de nadie y cada cual tiene la libertad de estar con quien quiera y cuando quiera después que se he adulto.

Desde aquí hacemos un llamado al respeto a las diferencias y al respeto a la vida.