El Parque Nacional Los Haitises, uno de los principales suplidores de agua de la población del país, está siendo diezmado por campesinos que tienen que talar los árboles para sembrar alimentos y hacer carbón.

El Comité por la Preservación del Parque Nacional Los Haitises denunció ayer que más del 60% de esa reserva natural ha sido depredado por la explotación inmisericorde a la que es sometida por los moradores del área.

Al hacer la denuncia, el párroco de Bayaguana, Gregorio Berroa Bello, dijo que están amenazando la zona con su desaparición.

Resaltó el párroco que es por ello que pretenden sensibilizar y concienciar al país sobre la difícil situación que atraviesa este parque que provee el agua a más del 43% de la población dominicana.

Berroa hizo un llamado al presidente Leonel Fernández para que intervenga de manera rápida y efectiva en la solución de este problema, de manera que se cumpla con el decreto 409 que establece la protección de esa área y la reubicación inmediata de los depredadores o moradores campesinos, otorgándoles el pago de sus mejoras, viviendas y parcelas ubicadas en los terrenos del CEA.

Estableció que una de las principales causas de la muerte de Los Haitises es el cultivo de los campesinos, quienes siembran para producir alimentos de ciclo corto, como yautía y ñame, pero también tumban y queman árboles.

Tras responsabilizar a las autoridades competentes por no tomar las medidas de lugar para evitar estas prácticas, Berroa afirmó que si el parque sigue como va, en pocos años alcanzará las mismas condiciones de deforestación de la región sur.

Advirtió que el Parque Nacional Los Haitises constituye un refugio de suma importancia para la fauna y la flora ya que allí se encuentran diferentes clases de aves que están en peligro de extinción.

LAS CIFRAS

11 zonas

Afectadas.La disminución del agua afecta a la provincia Santo Domingo, sobre todo a los municipios de Santo Domingo Este y Boca Chica. También a Juan Dolio, en San Pedro de Macorís; Sabana Grande de Boyá, en Monte Plata; La Romana, San Francisco de Macorís, Samaná, y Villa Arriba.

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